Drone by Drone realiza el seguimiento de cultivos desde el aire mediante drones. Esta técnica, también conocida como agricultura de precisión, permite localizar la gestión de cada parcela, prestando especial atención a aquellas zonas más demandadas.
Los drones están equipados con sensores que pueden capturar el espectro infrarrojo de las plantas. Con los datos recopilados por los sensores, se elaboran mapas de reflectancia personalizados para cada cultivo y para cada estudio de variable.
La Agricultura de Precisión permite conocer diferentes áreas de la superficie del cultivo y no tratarla toda de manera uniforme. Al dibujar mapas de reflectancia espectral se pueden determinar problemas localizados antes de que afecten a todo el cultivo.
Uno de los principales índices utilizados es el NDVI, que mide el grado de fortaleza de la planta o rendimiento clorofílico y que puede romper muchas conclusiones sobre la salud de la misma. Una vez que se genera el mapa de reflectancia del índice NDVI, el análisis puede determinar las áreas de cultivo que deben monitorearse con más cuidado, lo que permite una toma de decisiones más precisa.
Optimizando los recursos, aplicándolos exactamente donde se necesitan, se consiguen los siguientes objetivos:
– Las necesidades se ajustan a cada planta de cultivo.
– Se reduce el impacto asociado a la actividad agrícola para ahorrar recursos.
– Se obtienen incrementos de rendimiento y mejoras de competitividad.
Todo ello gracias a los datos que aportan los sensores que Drone by Drone pone en vuelo. Un claro ejemplo es la fotografía que ilustra el encabezado de la noticia. Una fotografía tomada por una cámara NIR en el espectro del infrarrojo cercano.